lunes, 29 de enero de 2018

El recuerdo de Santiago


Hoy os traigo el testimonio de la mamá de Santiago, mamá que como tantas otras tiene a su ángel en el cielo, cuidando de toda su familia y deseando que sean felices aunque sea con su recuerdo. Agradeceros todas las historias que me llegan y os recuerdo que si quieres escribir tu historia para esta sección del blog sólo tienes que escribirme a miarcoirisguerrero@gmail.com, hagamos entre todos que este duelo no sea silenciado.

"Os cuento mi historia del dolor más grande de mi vida.
En Abril de 2015 me enteré que estaba embarazada cuando al recoger una analítica de sangre que me había hecho porque tenía que operarme me lo anunció mi doctor... que alegría más grande... pero a la vez que miedo... sólo conseguí romper a llorar por la mezcla de emociones que sentía en ese momento.
Tuve un embarazo maravilloso, no tuve ni antojos ni vómitos, no tuve nada. En la semana 20 nos embarga la emoción al saber que sera un niño, un pequeño niño que se unía a nuestra familia. Con esa felicidad y encantados decidimos su nombre, SANTIAGO. Además, me confirmaron la fecha prevista de parto, el 15 de Enero, con el nuevo año reciente. En Noviembre viajé a España para estar en Navidad con mis padres, además de tener en mente traerme dentro de poco a mi marido también. El viaje fue bueno, y todo el mes de Diciembre, y aunque me costaba ya andar, estaba bastante bien para lo avanzado de mi embarazo.
El 3 de Enero comenzó ya mi pesadilla, lo recordaré y recuerdo tanto...Estaba de 38 semanas y fuimos a comprar las cosas que nos quedaban: la cuna, la bañera...todo lo necesario para su llegada, cuando empecé a tener dolores como de cólicos así que se lo dije a mi madre que me animó a ir a urgencias para tranquilizarnos. Al llegar me pusieron los monitores, y al principio no se escuchó nada, pero no me asusté porque era bastante normal ya que solía quitarse y apartarse siempre que ponían las correas. Con esa tranquilidad me pasaron a hacer una ecografía y fue en ese momento cuando la situación empezó a cambiar. La sala se lleno de médicos y enfermeras y a mi me empezaron los escalofríos a la vez que preguntaba desesperada si estaba todo bien. Me dijeron que no me alarmara pero que no encontraban el latido del bebé... comencé a gritar y a llamar a mi madre, cuando vino le dije que Santiago no tenía latido, y mi madre enloqueció...se puso a gritar y salió corriendo por el pasillo. Como la cosa no iba bien me pasaron a una habitación y me repitieron la eco. Confirmaron lo que ya me habían dicho, no había latido. Me iban a provocar el parto, y mientras tanto me pusieron un tapón en el cuello del útero. Mi madre llamó corriendo a mi marido que destrozado se puso a buscar billetes desde Colombia hasta aquí. Pasé el domingo y el lunes, y no avanzaba el parto a pesar de tener contracciones sólo había dilatado 3cm, por lo que el martes 5 de Enero, día de mi cumpleaños me avisaron que me iban a hacer una cesárea porque no me podían tener más tiempo así. Me pusieron la epidural y prepararon el quirófano y me derrumbé... me puse a llorar y las enfermeras y doctores me empezaron a abrazar y a dar muchos ánimos hasta que me durmieron. Cuando me desperté,me dijeron que ya lo habían sacado, y cuando me llevaron a recuperación pedí ver a mi pequeño ángel y me dejaron sola con él. Recuerdo tocarle y despedirme de él hasta que pedí que se lo llevaran.
El 6 de Enero llegó mi marido y empezamos a preparar el entierro, tras 8 días ingresada me pude ir a casa, sin mi hijo, sólo con sus cenizas. En ese tiempo no estuve sola ni un momento, 24 horas acompañada por toda la familia y además todo el equipo médico se portó muy bien conmigo, procurando no poner a ninguna embarazada cerca de donde estaba yo, para evitar escuchar el llanto de los bebés naciendo.
El 5 de Enero ha hecho dos años, y aún lo recuerdo como si fuera ayer, salir del hospital sin tu bebé en brazos... llegar a casa y ver su ropa, su carrito... es muy doloroso pero tuvo su recompensa ya que tengo conmigo a mi bebé arcoiris que ya tiene 4 meses, y lo adoro. Eso sí, siempre que me preguntan cuantos hijos tengo contesto que dos, y extrañados me dicen ¿dos?...sí dos, uno en el cielo y otro aquí en la tierra.

Relato de @stefany.bolano



Puedes contarme tu experiencia escríbiendome a miarcoirisguerrero@gmail.com y puedes seguir nuestra historia en instagram @mi_arcoiris_guerrero

jueves, 25 de enero de 2018

Las rabietas de los dos años

Todos conocemos la famosa expresión de los "terribles dos años", momento en el que nuestros pequeños angelitos deciden convertirse de repente en mini monstruos que nos la montan muchas ocasiones sin previo aviso y por lo que nosotros creemos son tonterias y reacciones exageradas pero...¿qué esta pasando realmente? ¿podemos solucionarlo? ¿mi hijo se va a convertir en el próximo episodio de hermano mayor?

Primero de todo, a las mamas que me lean... tranquilas, es un periodo que puede durar entre los 2 a los 4 años y que es verdad que hace que tengamos más canas de los nervios que nos genera pero es necesaria y fundamental. En primer lugar, gracias a esta etapa comienzan a formar su personalidad e identidad, por algo se denomina primera adolescencia, pero además, comienzan a descubrir las emociones más complejas y tienen que aprender a lidiar con ellas pues son demasiado intensas, tanto las buenas como las malas.
Ante este periodo de la vida de vuestros hij@s tenéis que haceros a la idea que vosotros sois los adultos, eso ¿qué significa?¿qué podemos mandar y regañar todo lo que queramos? para nada, todo lo contrario, tenemos que tener en cuenta que nosotros no podemos dejarnos llevar por las emociones, ni por la ira (regañando y gritando a nuestro hijo en exceso) ni por la tristeza (pensando que tienen algo personal contra nosotros, porque no es así) ni por el rencor (esperando a perdonar a nuestro hijo a que él o ella nos pida perdón). Tenemos que intentar hablarle de una forma dulce y tranquila, intentando mirarle a los ojos y transmitirle que cuando se calme un poco podremos hablar con él o ella nuevamente; incluso puede ser beneficioso dejarles un rato solos, ignorando esa conducta desagradable (un minuto por cada año que tenga) de esta forma le ayudamos a que se desahogue tranquilamente y evitamos razonar con ellos cuando están en esa rabieta (pensemos en lo que nosotros queremos cuando estamos realmente enfadados, normalmente no somos capaces de razonar porque nuestras emociones han tomado el control de nuestras acciones, e incluso a veces nos apetece que nos dejen un rato solos para relajarnos). Además, podemos cambiarle de entorno un rato para que se distraiga brevemente y la intensidad de la rabieta, de la emoción disminuya y nos permita entablar una conversación con él o con ella para reconducir la situación. Y por supuesto, buscar siempre que no pueda hacer daño con objetos que tenga alrededor o con la conducta que esté teniendo en ese momento.

Algunas consideraciones importantes... 

  • Cuando al niño se le ha pasado la rabieta, nosotros debemos dejarlo, no continuemos con frases como "¿ves? así estás mejor no como antes que te pones como loco". Zanjamos el tema y reforzamos lo tranquilo que está: "que bien se está cuando uno está relajado o feliz"
  • Evitemos gritos y frases que impliquen chantaje emocional como por ejemplo "si te portas así de mal mamá no te va a querer"
  • Reforcemos en el día a día las conductas positivas, no demos por hecho que tienen que hacerlas, porque a todos cuando hacemos las cosas bien nos gusta que nos lo reconozcan.
  • Es mucha la energía que utilizan los niños en estas rabietas por lo que no suele durar más de 30 minutos, debemos tener un poco de paciencia. Si somos consistentes en nuestras acciones pueden durar únicamente 5-10 minutos.
  • Si normalmente no lo hemos hecho y empezamos a ignorar las conductas desagradables (recordamos que es poco tiempo y que el niño no tiene que sentirse abandonado con esa acción) puede haber un incremento de las mismas hasta que empiece a disminuir.
  • Debemos ser consistentes y pacientes, no puedo aplicar todo a la vez ni una sola vez, hay que darle tiempo al tiempo, pensad en vosotros cuando queréis comenzar una nueva rutina, por ejemplo, hacer ejercicio, a todo el mundo le cuesta y necesita su tiempo de adaptación.
  • Parece ser que los niños y los bebés que son más llorones y difíciles de calmar tienden a tener más rabietas en esta etapa.
  • El niño está empezando a aprender cómo frustrarse, no os preocupéis que no le quedará trauma, sin embargo, si cedemos a todo lo que quiera para evitar conflictos, sí crearemos un problema porque tendremos un adolescente y un adulto con baja tolerancia a la frustración que le generará muchos problemas sociales en el futuro no muy lejano.

Estos son algunas acciones que se pueden llevar a cabo para las rabietas, todas dirigidas a disminuirlas no eliminarlas, porque eso no es beneficioso para el niño, las eliminará poco a poco según aprenda a hacer la gestión de sus propias emociones. Por supuesto hay más "truquitos" que iré subiendo en próximos post, pero os animo a que me contéis que trucos os han sido de utilidad y por supuesto os animo a que me escribáis con cualquier consulta o duda, bien sea a través de los comentarios o por privado.

martes, 23 de enero de 2018

Testimonios reales de mujeres reales sobre el aborto

Como ya sabéis, por mis circunstancias estoy muy concienciada con la muerte perinatal, y ya os comenté en otro post, que podéis consultar aquí, que se denomina duelo silenciado porque se habla poco o nada de ello y a las mamas que lo hemos vivido en muchas ocasiones tampoco se nos permite hablar de ello porque "hay que continuar y pasar página". Por eso, hoy quiero dar voz a mamas que han sufrido una muerte perinatal o abortos (generalmente tardíos) y que están esperando o han encontrado a su bebé arcoiris porque la sociedad a menudo no les permite hablar de ello.
Para investigar un poco sobre el aborto, investigué un poco por internet, y la verdad es que pocas dudas pude aclararme ya que la mayoría de las entradas se basan en la opción de someterte a un aborto (debate sobre el que no voy a entrar) y tienes que pasar muchas páginas para encontrar alguna referencia a abortos no deseados.

A nivel emocional el dolor es muy parecido a una muerte perinatal, en la mayoría de los casos tienen que dar a luz a sus hijos que muchas veces han sufrido ya una parada cardíaca y si encima no acompaña el trato sanitario... imaginemos como se encontrará esa mamá al finalizar el proceso.
Os dejo con sus testimonios, y si eres mamá en el cielo, has sufrido un aborto o muerte perinatal y quieres que comparta tu caso, escríbeme y le daremos forma.


Eloy, un ángel de 18 semanas (mamá @nazaret91)

Con 21 años me di cuenta que estaba embarazada cuando mi madre insistió en que me hiciese una prueba de embarazo tras una semana de retraso. Yo no solía hacer cuentas pero efectivamente estaba "premá hasta los ojos". El primer trimestre fue muy bueno, en la semana 6 tuvimos la primera ecografía y su corazón latía perfectamente. Su fecha prevista de parto, el 23 de Diciembre, el mismo día que mi hermano con el que se iba a llevar 3 años solamente. En la semana 12, la ecografía de la translucencia nucal estaba perfecta, pero me ofrecieron firmar el consentimiento del triple screening y acepté. Me sacaron sangre y ya sólo tenía que esperar los resultados, pero mi felicidad se enturbió un poco cuando al día siguiente me llamaron del hospital para que fuera justo al día siguiente a la unidad de alto riesgo. yo no sabía qué podía ser así que sóló conseguía llorar y llorar porque me puse en lo peor. 
Al entrar en consulta, me ponen un papel delante y me dicen que mi bebé tiene posibilidades de tener síndrome de down porque para mi edad había salido un procentaje alto... me costaba escuchar.... se me nubló la vista... y sólo me dijeron que podían hacer otra prueba para asegurarse a lo que yo accedí. ¡Cómo me arrepiento de eso! si no me hubiera hecho está última prueba mi bebé podría seguir conmigo...
Me pasaron a una sala, y el papá ya pasó conmigo; mientras me hacían una ecografía nos fueron explicando las posibles enfermedades que podía traer Eloy y fue excesivo para papi que se desmayó y lo tuvieron que mandar fuera a monitores por lo que me quedé sola. Pensé que me iban a hacer una amniocentesis, pero no, era una prueba donde me sacaron un trocito de placenta. No me dolió nada, fue algo sencillo y sólo me dijeron que hiciera reposo 72 horas y si no manchaba nada podía continuar haciendo mi vida normal. El reposo fue genial y a la semana, semana 13, los reusltados...TODO ESTABA PERFECTO. Todos felices, mi Eloy estaba bien y podía disfrutar de él, tanto que en la semana 15 me fui a verle en una eco 4D donde me dijeron que estaba todo bien.
Ya se me iba notando también tripita, pero en la semana 17 empecé a encontrarme mal; por la noche me dolía la barriga y por la mañana al limpiarme vi en el papel todo verde. Corriendo a urgencias donde no vieron nada, hongos me dijeron y me mandaron a casa.Pero yo me seguía encontrando fatal, de hecho estaba tiritando en pleno mes de Julio. Por la mañana me levanté sangrando y me fui a urgencias nuevamente pero no ven nada y me mandan para casa con reposo.
El 20 de Julio, en la semana 18 me encontraba peor, sin fuerza... y sobre las 10-11 empieza a dolerme la barriga hacia los riñones pero como me dijeron que podía ser infección de orina lo vi normal pero según pasaban las horas me encontraba tan mal que volvimos a urgencias.En esta ocasión al hacerme la ecografía les cambió la cara a los doctores... el niño se había parado y tenia que expulsarlo por lo que me mandan a la habitación con mi novio y mi madre, sin ningún médico a pesar de que yo tenía muchas ganas de empujar. Llamamos al ginecólogo y para él faltaba mucho por lo que cuando se fue me puse a empujar yo sola, agarrándome de una mano a mi madre y de la otra a mi novio... y finalmente Eloy nació, tan pequeñito con su bolsita... no pude mirar. Llamamos al médico que se pensó que era una tontería y cuando lo vió cortó el cordón y se lo llevaron en una sabana. Mi madre pudo verlo, a mí no me dejaron. Según ella estaba dormidito y era igual a su padre...
Como a mí no me salía la placenta me tuvieron que hacer legrado y al despertar me encontraba en una zona rodeada de mamás que iban a tener sus hijos con toda la felicidad del mundo. Se me rompió el alma.
Mi hijo Eloy, nació el 21 de Julio a las 5 de la mañana; a los tres meses me volví a quedar embarazada con todos los miedos del mundo. Esta vez no me hice la prueba, me negué. Emma nació el 30 de Julio perfectamente, una año y una semana después que su hermano...
Yo soy, mamá en el cielo y mamá en la tierra.

El primer embarazo de @mibebearcoirisz

Era mi primer embarazo, me enteré que estaba embarazada en la semana 8 y fue un sorpresón y desde el principio lo vivimos con mucha ilusión; pero duró muy poco. A la semana me levanté sangrando y fui directa al hospital. Me exploraron y a través de la ecografía vaginal observaron que no había nada. Se veía que había estado embarazada pero ya no había ni saco gestacional. Había sangrado mucho y según ellos lo había perdido ya.
Fue muy doloroso en todos los niveles, tanto físico como emocional. Me dolía tanto que llegué a pedir la epidural porque tenía muchas contracciones, así que me ingresaron. Me pusieron calmantes por vena y me quedé ingresada hasta que se me pasó el dolor. Después, mediante un análisis de sangre comprobaron que efectivamente había tenido un aborto.
Mi vida cambió aunque estuviese embarazada de muy poco. Sales de casa con una idea, asustada porque estás manchando pero sin pararte a pensar que puedes volver vacía. Tener una pérdida es tan doloso que es muy difícil de explicar...mi bebé llevaba sólo dos meses dentro de mí, y yo apenas hacia una semana que sabía de su existencia...
Pero desde el primer momento le amé y sentía que me habían arrancado un cacho de mí, sentía que mi bebé había estado conmigo siempre. Las primeras horas era como que deseaba que se hubieran equivocado y sentía que aún le tenía dentro, quería que fuera un error...
Lo más duro vendría al día siguiente cuando de repente sentí como algo salía de dentro de mí, y cuando fui a mirarlo, era un pequeño cuerpecito del tamaño de una nuez todo formadito y acurrucado. Aquel cuerpecito del tamaño de una nuez, era mi bebé, tenía piernas, cabeza, espalda, brazos...parecía un muñequito. No recuerdo la imagen muy nítida porque en el instante empecé a chillar llorando y rápidamente mi madre que estaba en casa vino y se lo llevó.
Creo que es lo más duro que me ha pasado en la vida.
Me quedé varía por dentro y a día de hoy creo que es un vacío que jamás se llenará.
Una pérdida gestacional duele. Ya sea de 8 semanas, de 20 o 40. Desde el minuto 0 es tu hijo, le quieres y sufres por él.
Justo al año, volví a quedarme embarazada y la ilusión me duró menos de una semana porque a las 6 semanas tuve otro aborto. Este fue más rápido y no fue doloroso a nivel físico pero a nivel emocional me quise morir. En uno de los momentos en que te preguntas, ¿qué le he hecho yo a la vida para que me pase esto?
Te quedas rota, sin esperanza, y por lo menos yo, sin ganas de oír hablar de bebés ni embarazos.
Gracias a la vida, hoy estoy esperando a mi bebé arcoiris, embarazada de 37 semanas y a punto de conocer al amor de mi vida, al que espero que sus dos hermanit@s cuiden desde el cielo. Nunca me olvidaré de mis dos estrellas porque yo soy mamá en el cielo y mamá en la tierra.


Puedes contarme tu experiencia escríbiendome a miarcoirisguerrero@gmail.com y puedes seguir nuestra historia en instagram @mi_arcoiris_guerrero

jueves, 18 de enero de 2018

¿Cómo elegir guardería?

Estrenamos sección de psicología donde ampliaré los post que os escribo para maminteresante y os dejaré este espacio para que me hagáis todas las preguntas que necesitéis, bien sea del tema del post, publicándolo en comentarios o alguna otra consulta o propuesta de tema, haciéndomela llegar a través del formulario de contacto, como ha hecho una de vosotras, que me pidió ayuda para la elección de guardería, momento en el que se encuentra actualmente.

Lo primero que tenemos que tener claro es que las guarderías no son un mero lugar donde "aparcar" a los niños cuando estamos trabajando o no tenemos tiempo, es decir, no son lugares donde sólo van a cuidar de ellos, deben ser lugares donde les estimulen y les ayuden a adquirir ciertas habilidades durante el día (siempre dentro de su edad y necesidades) por lo tanto, deberemos buscar centros que nos faciliten esta opción, que sean estímulantes para nuestros pequeños y que dispongan de actividades extraescolares por si queremos ampliar con alguna actividad, esto último más opcional. Lo ideal es que nos centremos en tres grandes grupos a la hora de seleccionar: personal de la guardería, seguridad y local.

Personal de la guardería


Algo fundamental es que los profesionales que se encuentren trabajando en el centro tengan la titulación correspondiente, esta es la de técnico especialista en educación infantil o título de magisterio especialidad educación infantil; lo mínimo es un educador y una persona de apoyo y puede suplementarse con algún auxiliar aunque no es obligatorio y podrá tener cualquier título relacionado con la atención infantil. Es importante que vosotros como padres y madres lo conozcáis porque tenéis derecho a solicitar esa información.

Además hay un ratio de niños por cada educador, es decir, que en una guardería con muchos niños deberán tener más personas empleadas para evitar riesgos y daños que se puedan hacer los menores, quedando la distribución tipo de esta forma:

  • 8 niños por educador en niños de entre 0-12 meses
  • 14 niños como máximo en niños de entre 12-24 meses
  • 20 niños por educador en aulas de 24-36 meses
Por supuesto, como os decía antes, siempre buscando la atención personalizada a nuestro bebé porque cada uno necesita reforzar o cuidar ciertos aspectos y no debemos quedarnos con la excusa de que "son muchos niños".
También es importante que os informéis de la línea pedagógica del centro, si cuadra con la idea que vosotros tenéis en mente o no igual que es fundamental saber cómo se comunican con los padres y con cuanta periodicidad porque es interesante saber con cierta regularidad los progresos de nuestro niño o nuestra niña.
Por último, los horarios del centro deben ser compatibles con los vuestros, ya que un centro puede gustaros mucho pero generar una alteración drástica de vuestros horarios, lo que a la larga os acabará quemando y cansando. Es muy útil para entender la filosofía del centro y saber si se adapta a lo que estáis buscando que os quedéis al finalizar la jornada lectiva para poder preguntar las opiniones e impresiones de otros padres.

Local destinado a guardería

Debe ser un edificio de uso exclusivo para guardería, o si se destina a otros usos que este situada en la planta baja o primera y con un acceso independiente del exterior, aumentando de esta forma la seguridad y la facilidad en caso de evacuación.
La luz natural es fundamental, por lo que debemos buscar lugares con un patio exterior al que se pueda acceder directamente desde el centro (superficie mínima de 75 m2) y con zonas de sombra preferiblemente así como una zona techada para los días de lluvia (o en su defecto que os indiquen que medidas adoptan los días de lluvia). El patio puede ser interior pero siempre deberá tener luz natural y ventilación igual que las aulas (que también deben estar limpias, ¡FUNDAMENTAL! y ordenadas).
Debe haber un mínimo de 3 aulas, cada una con una superficie mínima de 30m2 con baño (especialmente las destinadas a niños mayores de dos años) y zonas bien diferenciadas de juego y descanso. Las aulas se destinarán a los bebés de 0-12 meses, otra para los de 12-24 meses y otra para los de 24-36 meses; además de añadir un aula multiusos.
Finalmente debe disponer de cocina o zona donde preparar los alimentos con un buen servicio de catering o una persona con la titulación necesaria para ello (manipulación de alimentos). Es importante que en las entrevistas y visitas hablemos con el personal de cocina, especialmente si nuestros hijos tienen alguna alergia alimenticia o una dieta concreta que queramos seguir (como puede ser el caso de dietas vegetarianas o veganas).
El último aspecto a tener en cuenta con respecto al lugar físico es la distancia a la que se encuentre, y aquí tenemos dos opciones, ambas personales y ha valorar por cada uno: la primera opción es valorar una guardería cerca de nuestra casa, para evitar desplazamientos largos e innecesarios con el niño en coche; y la segunda opción, una que nos pille cerca del trabajo para poder ir fácilmente en caso de que haya algún problema o para recoger al pequeño o pequeña en cuanto salgamos del trabajo.

La seguridad en la guardería

Este apartado es muy básico pero en muchas ocasiones se nos olvida comprobarlo, los aspectos a tener en cuenta son:
  • Enchufes o tomas de corriente deben estar fuera del alcance de los niños o con protección infantil; lo mismo sucede con los radiadores.
  • Las ventanas no deben poder ser usadas por los niños, es decir, que no tengan la opción de abrirlas
  • Suelos antideslizantes
  • No puede haber superficies rugosas o aristas en esquinas ni escalones, y de existir se deben poner los medios para que no dañen a los niños.
  • Debe existir un plan de emergencia y evacuación claro
  • El aula de los niños más pequeños no debe tener la opción de que éstos salgan del mismo por su propio pie (o rodillas en caso de estar gateando)

Si después de vigilar todas estas características sigues teniendo dudas, acude en horario lectivo para ver cómo los educadores interactúan con los niños y si os gusta cómo se relacionan con ellos.


Y vosotros, ¿cómo habéis elegido guardería? ¿qué criterios habéis seleccionado? si te gusta este post o algún otro de los antiguos no dudes en apuntarte a nuestra newsletter para que podamos seguir creciendo y escribiendo contenido de calidad.

Imagen obtenida de internet, autor desconocido

viernes, 12 de enero de 2018

Lactancia materna en prematuros

Numerosos estudios hablan de la capacidad que tiene el cuerpo para diseñar la leche especial que tu bebe va a necesitar según el momento del día, y esto en la prematuridad es un factor fundamental porque disminuye la morbilidad (enfermedades asociadas) y un fantasma que nos rondó durante toda la estancia en la UCI y de la que al final nos libramos: la enterocolitis necrotizante. La lactancia materna es complicada ya de base, molesta, genera mastitis, grietas… y en muchas ocasiones hay que ser muy perseverante para conseguir establecer una lactancia adecuada y exitosa, pero si hablamos de grandes prematuros la cosa se complica. Hay que recordar que no es lo mismo hablar de prematuros que de grandes prematuros, no sólo por su peso, sino también por su inmadurez neurológica y digestiva entre otras. Lo que a nosotros nos parece muy sencillo, masticar, tragar, respirar… realmente es muy complicado, y cuando tuve que enseñar a Daniella a comer descubrí que la acción de comer es muy compleja. Un bebe a término sabe comer, lo tiene ya establecido de forma innata, ya sea lactancia materna o artificial pero sabe cómo tiene que succionar (aunque pueda costarle), cuando tiene que respirar y cuando tiene que tragar; un prematuro extremo no, de hecho, inicialmente su alimentación es a través de sonda y mínima cantidad (Daniella empezó tomando por sonda 1cc de leche, y hubo que parar hasta en tres ocasiones para ponerla a dieta por las infecciones). Como ya sabéis, mis pequeños nacieron en la semana 25, y hasta la semana 34 no se les puede poner al pecho (o dar biberón) porque no van a ser capaces de succionar correctamente, y aún así hay que tener mucho cuidado y mucha paciencia. Es decir, que estuve más de 9 semanas usando un sacaleches sin nada de estimulación por parte de mi bebé, así que para mí establecer una lactancia materna exclusiva fue imposible ya que a esto se unía los altibajos emocionales propios de la situación. Mi comienzo con la lactancia fue sencillo y atípico, comencé con el sacaleches cada 3 horas, y ya en la primera extracción conseguí unos 20-30ml de leche, una cantidad importante para ser prematuros, haber tenido parte de cesárea y ser gemelar; pero es cierto que la subida de leche la tuve relativamente pronto, pues ya la primera vez que les conocí y vi a David empecé a manchar unas pequeñas gotas de leche. Con las cantidades que sacaba y lo poco que comía Daniella hice un buen banco de leche casero que permitió que mi ratona continuase algo más con leche materna. Estuve asesorada en todo momento por todo el equipo sanitario, pero en especial por una enfermera, Beatriz, que aclaraba todas mis dudas y tenía mucha paciencia conmigo, y todos me apoyaron en espaciar la estimulación 4 ó 5 horas pues la cantidad que tenía era importante y podía “relajarme” un poco, sin embargo, el problema llegó cuando empezó a tener problemas graves de salud Daniella, pues las tomas me las saltaba, no me apetecía dejar de tocarla o de estar en canguro para sacarme leche, y esto hizo que la producción descendiese, aunque después intenté volver a encauzarla fue realmente difícil y frustrante, entre otras cosas, porque había una gran presión al saber que mi leche era de vital importancia para la niña. Inicialmente probé con la cebada, tanto en pastilla como a través de cerveza 0,0 (recordad que la sin tiene algo de alcohol aunque sea mínimo) y no noté ninguna diferencia; aumenté el consumo de agua pues dicen que la ingesta de líquidos produce más líquidos, y probé a sacarme leche teniendo a la niña encima en canguro, y además de complicado fue inútil pues la cantidad de leche en vez de aumentar, disminuía. Por último y ante la frustración y desesperación que tenía probé, asesorada por las enfermeras con lo que llaman la “Extracción Poderosa” o también llamada tortura china: consiste en estar durante 48 horas estimulando y extrayendo leche durante 5 minutos de cada pecho, cada hora, noche incluida, agotador y aunque parecía prometedor se quedó en nada. Al final, tan sólo producía 240 ml en 24 horas, algo mínimo y que agotó las reservas de mi banco de leche por eso Daniella acabó tomando biberón. Tuvo suerte, porque dos meses exclusivos de sacaleches complican la lactancia y de hecho no conozco a ninguna mamá que prematuros extremos que consiguiese establecer lactancia materna exclusiva, como mucho, mixta ya que ante la dificultad que tienen los prematuros para engordar es importante complementar con alguna toma de fórmula para evitar pérdidas de peso y en las que son sólo con leche materna hay una parte de la toma que se realiza con biberón pues el bebé tiende a cansarse al estar al pecho. La satisfacción que me queda es que aunque fueron pocas veces, Daniella pudo ponerse al pecho para realizar succiones no nutritivas y aunque es una espinita que llevaré clavada siempre, sé que hice lo que pude hasta que mi cuerpo dijo basta; por eso no creo que el fracaso en la lactancia con grandes prematuros se deba únicamente a falta de asesoramiento o de apoyo por parte de los profesionales médicos, sino más bien a las circunstancias, en especial a la imposibilidad de poner al bebé al pecho para que estimule que es realmente lo único que aumenta la producción. Si sois mamás de prematuros o mamas que habéis tenido dificultades con la lactancia, me encantaría escuchar vuestras historias y cómo conseguisteis o no establecer la lactancia materna.

Puedes seguir nuestra historia en instagram (@mi_arcoiris_guerrero) y si tienes algo interesante que contar sobre prematuros, tu historia, información útil... puedes escribirme a miarcoirisguerrero@gmail.com

jueves, 11 de enero de 2018

Daniella y su estrella

Daniella ya tiene una estrella en el cielo,  concretamente en la Osa Mayor y conseguirlo ha sido muy fácil; ¿cómo lo hemos hecho? gracias a la iniciativa Etoilez Moi que te ofrecen regalar una estrella con el nombre que tu decidas y para el evento que tú quieras.



A Papá Arcoiris y a mí nos ha parecido una idea estupenda, porque en el firmamento habrá una estrella con el nombre de nuestra pequeña que vivirá muchísimo tiempo, transmitiéndonos esa paz y serenidad que nos embarga cuando miramos el cielo estrellado. De hecho, estamos pensando adquirir otra para su hermano, para que puedan estar juntos en el firmamento.

Desde 24,90 puedes adquirir tu estrella para bautizos, bodas, celebraciones... ofertando distintos packs donde podréis elegir incluso la constelación que más os guste y siempre os llegará con un certificado donde se indican las coordenadas de vuestra estrella que será única e irrepetible y se conserva en el Internacional Celestial Repertory.



Si a vosotros también os interesa comprar una estrella, tenéis el banner de Etoilez-moi a la derecha que os llevará directamente a la página y os permitirá ver todas las opciones posibles.

domingo, 7 de enero de 2018

Balance 2017

Nuevo año y toca hacer un balance del año que se queda atrás, y aunque tarde creo que es necesario para toda mi familia. Estas Navidades han sido algo agridulces, han sido las primeras para bien y para mal, y hay momentos que duelen, que sientes que te falta uno, pues tu familia, tal como la habías pensado cambió aquel 13 de Mayo. Este 2017 ha sido el año que me ha pasado lo peor que me podía pasar en la vida pero también lo mejor que podía pasarme pero... mis sentimientos ya los conocéis bastante, por eso, en esta ocasión le he pedido a mi marido que sea él quien haga este balance, ¿por qué? porque la muerte perinatal, los embarazos y nacimientos siempre se viven dese el punto de vista de la mujer, pero en muchos casos hay otra persona detrás. Puede ser un padre, como es el caso, o puede ser otra mamá en caso de parejas homosexuales, o un familiar en caso de madres solteras... siempre hay alguien que pasa por esta experiencia dura y bonita y del que la gente no suele preocuparse, por eso hoy le doy voz en esto; y aunque quizás la redacción no sea la mejor y él quería que lo re-escribiera yo de otra forma, no lo voy a hacer, porque es su manera de expresar su interior:


Mi balance de 2017, creo que nunca me he hecho esta pregunta, siempre he sido de mirar hacia delante sin pensar, sin analizar este tipo de cosas... pero en esta ocasión toca evaluar y analizar porque 2017 no ha sido un año normal, ni mucho menos, ha sido un año muy, muy duro; el más difícil de mi vida con diferencia: conseguir el embarazo, que fuese gemelar con sangrados, cólicos nefrítico, rotura de bolsa muy pronto y al final parto en la 24+6, complejo, cesárea y parto seco natural. Recuerdo aún esos momentos, la incertidumbre me comía junto al miedo, fundamentalmente por mi mujer, luego ya vino el miedo relacionado con mis hijos pero en ese momento... sólo vi a mi mujer entrando a quirófano, sin poder acompañarla, ni ver a mis hijos nacer ni saber qué ocurría...Recuerdo cuando salió Daniella, directa a la UCI pero los pediatras pararon, nos dejaron verla, nos enseñaron su carita y nos tranquilizaron pero después salió David, iban muy rápido, con el respirador, preocupados y pararon brevemente para que por lo menos le conociéramos. Nunca podré olvidar ese momento. Por eso, 10 de Mayo, el día más feliz de mi vida, pero con una gran amargura que me sigue acompañando a día de hoy, pesaban 669 y 812 gramos, y todo se nos ponía aún más difícil, así que nuestro lema paso a ser "pasito a pasito" porque se ganaban batallas pero no sabíamos si se iba a ganar la guerra. Nos aferrábamos a lo positivo que nos dijesen los pediatras y a ese maravilloso "están estables", era lo único en que pensaba. El 11 de Mayo mi hija me terminó de conquistar, supe en ese momento lo que era el amor de verdad cuando me dejaron tocarla y con sus manitas me agarró el dedo...recuerdo ir a la habitación de mi mujer llorando, alarmarla y tranquilizarla porque había sido lo más maravilloso que me había pasado nunca.

13 de Mayo, el peor día de mi vida, nuestro hijo nos dejó, se fue... y desde entonces me acompaña la misma frase "Tus alas ya estaban listas para volar", pero mi corazón nunca estuvo listo para verte partir" y es así, tal cual, nunca lo estuvo ni lo está.
Después de ese día, nubes y claros; muchas nubes y pocos claros con las buenas noticias de nuestra hija que iba consiguiendo pequeñas cosas gracias a que su hermano vino al mundo para darle vida a ella y se convirtió, como dice su madre, en su arcoiris guerrero o como digo yo en mi espartana; que con una fuerza increíble superó cosas que muchos adultos ni siquiera podríamos. Ductus, reapertura y operación del mismo, fallos renales, broncodisplasia, no tener tensión arterial...hasta que por fin, gracias a sus huecos y a la ayuda de médicos, enfermeras de neonatos y al esfuerzo y corajde de su madre que pasaba horas y horas metida en la UCI para poder estar un poco cada día con ella o pegada a un sacaleches para poder alimentarla... llegó a los 2 Kilos 400 gramos y pudimos traérnosla a casa.

Después de eso, todo ha seguido siendo nubes y claros, yo empecé el duelo por mi hijo cuando salimos del hospital porque antes creía que tenía que estar fuerte para mi mujer, por eso, a día de hoy, cuando cojo a mi hija en brazos muchas veces lloro, y otras no querría soltarla y solo quiero abrazarla todo lo fuerte que pueda. Tengo que agradecer al 2017 por dármela a ella, porque es la que hace que me levante por las mañanas, pero, siendo sincero y claro... también ha sido muy cabrón, porque nos lo ha complicado más de lo que esperábamos; por eso, el 2017 a sido el peor y el mejor año de mi vida, pues ahora tengo un ángel en el cielo que cuida de mi y de mis dos ángeles en la tierra.



Never in my arms, always in my heart

Puedes seguir nuestra historia en instagram (@mi_arcoiris_guerrero) y si tienes algo interesante que contar sobre prematuros, tu historia, información útil... puedes escribirme a miarcoirisguerrero@gmail.com